domingo, 18 de marzo de 2012

Badajoz se queda sin personajes






Un reloj que hace años no sabe si hace frío o calor, para él siempre hay ---- grados, que es como decir que no hay temperatura. Y semáforos y muñequinos precisan más atención de los concejales. Mientras, don Apolonio sigue haciendo sus rondas por la catedral. (Fotos M. LÓPEZ)

A mis cortas luces que a Badajoz le harían falta más concejales y, con ello, más personajes. Con 27 no llegan a los múltiples cometidos que les encomendamos. Porque se ve además que a muchos de nuestros concejales, a los que tienen asignadas competencias, no les 'vaga' a hacer todo lo que deberían. Ahí está el concejal de los relojes, que para mi que o no tiene tiempo o no puede con su trabajo, sabiendo como debería saber que al reloj de la autopista, situado junto al bar El Dilema, no le entra en la cabeza (me refiero al reloj) que estamos en un año bisiesto y desde el 29 de febrero marca un día de más (?), con lo que el viajero que llega a Badajoz sabe que acaba de perder un día. O el reloj del Carrefour de la carretera de Valverde, que marca siempre igual temperatura (---- grados, asómense y los verán). Y el señor concejal de los relojes, desbordado y agobiado, no hace caso a las demandas de quienes queremos saber qué frío o qué calor hace cada vez que pasamos por allí. Esta ciudad necesita ayudar a los concejales, porque hay muchos cometidos para tan pocos. No dan abasto el concejal de los patos de Castelar, el del mercadillo (el de los martes, el de los domingos), el de las Crispitas, el del cementerio, el de los bomberos, el del azud, el de los barrenderos, el de la Semana Santa (que además es pregonero), el del tractor, el del carnaval, el del botellón, el de los muñequinos (los de los semáforos y los del suelo...), el de control a la oposición (?), el deslenguado... Necesitan ayuda, pero ninguno de ellos precisa tanta como el concejal no nombrado: el que le gustaría ser a Felipe Martín, el que sigue siendo necesario en Badajoz, el concejal de las tonterías.Y además, los concejales solían ser personajes. Y Badajoz se está quedando sin personajes. Sólo nos queda don Apolonio, que no es concejal. Y eso es grave. Alcalde, a vé...

miércoles, 7 de marzo de 2012












Todo está en venta. O casi todo. Todo está en alquiler. O casi todo. Ya no sabe uno muchas veces si el aire mismo, si la lluvia (já, esa es otra), si la brisa que nos conforta a primera hora, es de verdad o es una mentira más de las muchas que el sistema, los mercados, la Banca, el capital... todos, nos están echando sobre la cabeza. Mentira, mentira, mentira. Y sobre nosotros, una sensación de asfixia, de no poder respirar. Parece que se nos caen encima los cartelones de locales comerciales, de casas en venta, de piso que se malvenden o malalquilan, de locales cerrados. Se traspasa, se vende, cómpreme, lléveme, tráigame, haga, estudie, no escupa, oferta, barato, descuentos, no puedo atenderle, déjeme, no me empuje... Todo así, poco más o menos. Pero, además, es que ni siquiera llueve... Así no.