viernes, 22 de septiembre de 2017

El aceitunero del parque de Las Moreras




(Persiste y aumenta la invasión de patos en el que podríamos llamar Parque de Las Moreras. Al menos a mi, tamaña cantidad de patos ya no me hace tanta gracia. En la segunda foto, los olivos de Santa Marina, en los que se aventura también regular cosecha, aunque no llueve. Buen punto para cargar de aceitunas y aliñarlas en casa. Y por fin, en la tercera foto, la valla que han colocado los "mossos" de Badajoz para protegernos de esa losa que lleva meses tapando un agujero en Santa Marina y que ha originado protestas en los paseantes. Fotos, M. LOPEZ)




¡Qué bien lo describió Miguel Hernández! Hablaba de los aceituneros altivos, decidme en el alma de quién, de quién son estos olivos. Y como resulta que lo que hay en España es de los españoles (excepto lo que ustedes y yo sabemos y yo no quiero mentar) pues digo que resulta que los olivos que aún están en pie en lo que antes eran Las Moreras, allá por el camino viejo de San Vicente, junto a la calle de las Lavanderas de Botoa, ha venido a ser ahora el parque del río y en él hay algunos olivos a los que un avispado ciudadano de Badajoz acude a estrujar las aceitunas. Provisto de las lonas oportunas, con un varal de los de verdad, no un palo de fregona, varea como puede las aceitunas y se las lleva, no sé si para vendérselas a Pepe Aguedo o para aliñarlas con cuidado en su casa y prepararse unos curiosos aperitivos. En este año con esta sequía que tan mal viene para las aceitunas y la bellota, es enternecedor -así lo vería Martínez Mediero- que un sujeto se vaya con la bici y el saco y las lonas a ordeñar los olivos mientras los jubilados del Imserso que todo lo invadimos andemos por allí como que haciendo deporte, esquivando los picotazos de los patos o las ocas o la madre que los trajo. Hace años un ciudadano semejante a este rebuscaba las aceitunas en los olivos de la Avenida de Santa Marina, que este año también traen su cosecha. Esos olivos están cerca de la plancha que tapa un agujero insoportable en mitad de la dichosa avenida, una losa que sigue ahí y que un empedernido escritor de cartas a HOY, José Luis Martínez, ha denunciado y lo más que ha logrado es que los 'mossos' de Badajoz le hayan colocado encima una valla que debe llevar ahí más de un mes y lo que le queda. Patos, aceitunas, sequía, 'mossos', vallas, nenúfar, camalote... y sin el AVE ni el tren digno. Esto es Badajoz, es lo que hay, a vé...

(Publicado en la edición impresa de HOY el lunes  18 de septiembre de 2017)


No hay comentarios: